Esta semana llega el verano, aunque térmicamente hace tiempo que ha llegado. Para refrescarnos tenemos afortunadamente las piscinas y , seguramente, habréis observado que cuando llevamos mucho rato en el agua se nos arrugan los dedos de las mano y de los pies como si fuera uvas pasas. la pregunta de esta semana es:
¿Por qué se nos arrugan los dedos cuando llevamos mucho tiempo en el agua?¿Ocurre igual con el resto del cuerpo?
Hypatia:" Resérvate el derecho de pensar: incluso equivocarse es mejor que no pensar nada".
Asimov: “Una ciudadanía que no entienda como opera la ciencia corre el peligro de caer en las redes de la ignorancia”
Jorge Luis Borges:“La duda es uno de los nombres de la inteligencia””
Galileo Galilei:"Nunca me he encontrado con alguien tan ignorante de quien no pudiese aprender algo"
Albert Einstein: "Nunca consideres el estudio como una obligación sino como una oportunidad para penetrar en el bello y maravilloso mundo del saber" "La palabra Dios para mí no es más que la expresión y el producto de la debilidad humana y la Biblia una colección de honorables pero primitivas leyendas" |
Gloria Torres Sánchez 3ºB
ResponderEliminarAsí, por ejemplo, todos hemos observado que, cuando permanecemos mucho tiempo en el agua, las yemas de los dedos de manos y pies se arrugan, pero, al poco tiempo de salir de ella, vuelven a su estado natural. Esto no ocurre porque hayamos envejecido repentinamente, sino que es un fenómeno físico perfectamente explicable.
La piel humana consta de tres capas: la más profunda es el tejido subcutáneo, que contiene vasos sanguíneos, nervios, tejido conectivo y grasa. A continuación está la dermis, donde se sitúan las raíces del pelo. Y, por último, está la capa más superficial, la epidermis, que protege a las capas más profundas y ayuda a conservar el agua corporal.
A su vez, la epidermis consta de cuatro capas: la de las células basales, la de células escamosas, la granular y el estrato córneo. Ésta última es la más superficial, la que tocamos, y en ella se forma, a su vez, una capa externa de células muertas y de queratina. Y, puesto que las manos y los pies son las partes del cuerpo que más utilizamos, sufren mayor desgaste y esta capa citada es más gruesa.
La piel, aunque es la principal barrera de nuestro organismo, no es impermeable y, al bañarnos, absorbe agua. Al hacerlo, la epidermis se hincha, pero como está ligada a la capa inferior y el líquido se sitúa entre ambas, éstas no se separan totalmente y se forman las arrugas, que son mayores en manos y pies por la mayor cantidad de células muertas y queratina que tienen.
Este comportamiento se debe a la forma en que responde la piel ante la humedad y a la propia composición de la piel, que está formada por dos capas principales: la dermis y la epidermis. Ambas capas están unidas, pero existe un ligero espacio intermedio.
ResponderEliminarAunque es la principal barrera de nuestro organismo frente al exterior, la piel no es impermeable, y así absorbe agua del aire y, en mayor medida, absorbe agua cuando nos bañamos.
En las manos y los pies la piel es bastante más gruesa y eso hace que absorba más agua que el resto del cuerpo y que el efecto sea más perceptible. A medida que la epidermis se hincha más y más, se separa de la dermis y forma surcos y crestas, sobre todo en las yemas de los dedos, pues en las palmas y en las plantas las dos capas están más unidas.
Después de una larga inmersión, la piel arrugada se reblandece enseguida al salir del agua. Al lavarla en agua jabonosa se eliminaron los aceites naturales que recubren la piel y que impiden que el agua escape. Así pues, desprovista de su recubrimiento protector, el exceso de agua se evapora rápidamente. En realidad, la piel se seca tanto después de un baño que contiene menos agua que antes de meterse en la bañera, por lo que es una buena idea aplicarse una crema hidratante después del baño.
Hay muchas teorías sobre este fenómeno. Las 2 mas importantes son:
ResponderEliminarLA CAPACIDAD DE ABSORBER AGUA POR LA PIEL
De manera habitual cuando respiramos absorbemos agua.
Pero cuando estamos sumergidos absorbemos aún mas agua por la epidermis, la capa mas exterior de la piel.
Al hacerlo la epidermis se hincha y se separa de la dermis, la segunda capa de la piel, y forma surcos y crestas. El efecto no es visible en muchas partes del cuerpo porque la piel es fina y no absorbe mucha agua, sin embargo en los dedos, el efecto es visible al cabo de poco tiempo porque esta parte del cuerpo absorbe mas agua porque la piel ahí, es mas gruesa.
FENÓMENO OSMOSIS
Este fenómeno es todo lo contrario a la anterior teoría.
Aquí (si por ejemplo nos bañamos en una piscina) en vez de absorber agua lo que hacen nuestras células de la piel es perderla ya que la concentración de sal (soluto) es mayor en nuestro cuerpo que en la piscina y pasa parte del agua que tenemos para que se igualen ambas concentraciones. Al perder agua la piel se nos arruga.