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sábado, 12 de noviembre de 2011

Pregunta curiosa 2

Seguramente tod@s hemos sentido una sensación extraña cuando escuchamos nuestra voz en una grabación de vídeo o en una grabadora. Esto tiene una fácil explicación que seguro buscaréis y compartiréis en el blog. La pregunta sería:
¿Por qué NO nos reconocemos nuestra propia voz cuando nos escuchamos en una grabadora?
Os animo a que participéis y tenéis que dar vuestras respuestas antes del 19 de Noviembre


7 comentarios:

  1. Alicia Susin 3ºA:
    El sonido puede llegar hasta el oído interno por dos sendas diferentes, que pueden, a su vez, afectar lo que percibimos. Los sonidos que el aire transmite son conducidos a través del canal auditivo externo, el tímpano y el oído medio hasta la cóclea, una espiral llena de liquido que se encuentra en el oído interno. En cambio, el sonido transmitido por vía ósea radioalcanza la cóclea directamente, a través de los tejidos de la cabeza.

    Al hablar, la energía sonora se difunde por el aire que nos rodea y llega hasta la cóclea a través del oído externo, por conducción aérea. Pero el sonido también viaja directamente desde las cuerdas vocales y otras estructuras hasta la cóclea, y las propiedades mecánicas de la cabeza refuerzan las vibraciones de baja frecuencia, de tonos más graves. La voz que oímos cuando hablamos es la combinación del sonido transmitido por ambas vías. Cuando escuchamos una grabación de nuestra propia voz, se elimina la senda de conducción ósea, que nosotros consideramos parte de nuestra voz “normal”, y solamente oímos la componente transmitida por el aire, aisladamente, que no nos es familiar. Podemos experimentar el efecto inverso taponándonos los oídos, con lo que solamente oiremos las vibraciones conducidas por los huesos.

    Algunas personas sufren anomalías del oído interno, que intensifican tanto la sensibilidad al componente de transmisión interna, que el sonido de su propia respiración les resulta agobiante, y pueden llegar incluso a oír el movimiento de sus ojos en las órbitas.

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  2. por dos motivos:
    1:el medio por el cual se propaga el sonido,
    dependiendo del medio por donde se propage el sonido se oye de una manera u otra, por ejemplo cuando damos un golpe en una mesa oímos el golpe porque el sonido se ha propagado por el aire pero si pegamos la oreja a la mesa el golpe se oye mas agudo y rápido porque el sonido también se ha propagado por el material de la mesa. también pasa cuando respiramos helio en nuestros pulmones; al hablar, como el helio es mas ligero que el aire, el sonido puede viajar mas rápido en nuestro interior y eso hace que escuchemos nuestra voz mas rápida y por tanto mas aguda.
    lo mismo pasa cuando hablamos:
    cuando nosotros hablamos el sonido viaja a través de nuestro interior desde las cuerdas vocales hasta la cóclea que es una estructura en forma de tubo enrollado en espiral que se encuentra en el oído interno y funciona a través de las vibraciones que le llegan que mueven sus líquidos(perilinfa y endolinfa)deformando las células ciliadas existentes en el interior. Estas células transforman las ondas sonoras en impulsos eléctricos que llegan al nervio auditivo y de este nervio a la corteza auditiva que es el órgano encargado de interpretar los sonidos.
    pero también viaja a través del aire.
    sin embargo cuando nos grabamos y reproducimos nuestra voz, no la oímos desde dentro si no desde fuera y solo viaja por el aire no por nuestro interior así que la oímos distinta
    el segundo motivo por el cual no nos reconocemos nuestra propia voz cuando nos escuchamos en una grabadora es que los micrófonos graban nuestra voz considerando la frecuencia como se reproduce en el aire. Pero muchas veces, el procesador que analiza y sintetiza la voz no lo hace. Es por eso que nuestra voz suena monótona y ligeramente más aguda, porque el sintetizador no considera el aire (medio por el cual se transmite el sonido). Las bocinas reproducen exactamente lo que se ha grabado, pero las bocinas hacen el sonido apropiado para ser reproducido en el aire, entonces la voz grabada suena aún más distorsionada a la grabada y a la original.

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  3. Mª Dolores 4ºA
    Nosotros nos oimos con una voz diferente porque no nos llega el sonido de fuera, si no que desde las cuerdas vocales las ondas viajan hasta las zonas más profundas del oídos( el oído y la faringe están conectados por las trompas de Eustaquio, aunque estas trompas no tienen nada que ver con el sonido, si no con la presión), traspasando tejidos, que hacen lo que oigamos nuestra voz de forma distinta a como la oyen los demás. Creo...

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  4. MªÁngeles Gutiérrez Belmonte 3ºA
    El sonido puede llegar hasta el oído interno por dos sendas diferentes, que pueden, a su vez, afectar lo que percibimos. Los sonidos que el aire transmite son conducidos a través del canal auditivo externo, el tímpano y el oído medio hasta la cóclea, una espiral llena de liquido que se encuentra en el oído interno. En cambio, el sonido transmitido por vía ósea radioalcanza la cóclea directamente, a través de los tejidos de la cabeza.

    Al hablar, la energía sonora se difunde por el aire que nos rodea y llega hasta la cóclea a través del oído externo, por conducción aérea. Pero el sonido también viaja directamente desde las cuerdas vocales y otras estructuras hasta la cóclea, y las propiedades mecánicas de la cabeza refuerzan las vibraciones de baja frecuencia, de tonos más graves. La voz que oímos cuando hablamos es la combinación del sonido transmitido por ambas vías. Cuando escuchamos una grabación de nuestra propia voz, se elimina la senda de conducción ósea, que nosotros consideramos parte de nuestra voz “normal”, y solamente oímos la componente transmitida por el aire, aisladamente, que no nos es familiar. Podemos experimentar el efecto inverso taponándonos los oídos, con lo que solamente oiremos las vibraciones conducidas por los huesos.

    Algunas personas sufren anomalías del oído interno, que intensifican tanto la sensibilidad al componente de transmisión interna, que el sonido de su propia respiración les resulta agobiante, y pueden llegar incluso a oír el movimiento de sus ojos en las órbitas.

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  5. Gema Gutiérrez 4ºA
    Es debido a que cuando hablamos el sonido que escuchamos de nuestra propia voz no solo nos llega por el aire si no que también absorbemos las vibraciones que reciben los huesos de nuestro cráneo y llegan al oído interno o tímpano a través del liquido, de la trompa de eustaquio, esto es lo que nos hace parecer que nuestra voz suena distinta de cómo cuando la escuchamos en una grabación. Como las demás personas que escuchan la grabación de voz de una persona solo reciben los sonidos por el aire, es por eso que no les parece que haya diferencia entre la voz salida de los labios de dicha persona y la voz escuchada en una grabación. Creo que esto sería más o menos un resumen de todo lo que he visto del tema.. si es que está bien, claro.

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  6. El sonido puede llegar hasta el oído interno por dos sendas diferentes, que pueden, a su vez, afectar lo que percibimos. Los sonidos que el aire transmite son conducidos a través del canal auditivo externo, el tímpano y el oído medio hasta la cóclea, una espiral llena de liquido que se encuentra en el oído interno. En cambio, el sonido transmitido por vía ósea radioalcanza la cóclea directamente, a través de los tejidos de la cabeza.


    Al hablar, la energía sonora se difunde por el aire que nos rodea y llega hasta la cóclea a través del oído externo, por conducción aérea. Pero el sonido también viaja directamente desde las cuerdas vocales y otras estructuras hasta la cóclea, y las propiedades mecánicas de la cabeza refuerzan las vibraciones de baja frecuencia, de tonos más graves. La voz que oímos cuando hablamos es la combinación del sonido transmitido por ambas vías. Cuando escuchamos una grabación de nuestra propia voz, se elimina la senda de conducción ósea, que nosotros consideramos parte de nuestra voz “normal”, y solamente oímos la componente transmitida por el aire, aisladamente, que no nos es familiar. Podemos experimentar el efecto inverso taponándonos los oídos, con lo que solamente oiremos las vibraciones conducidas por los huesos.

    Algunas personas sufren anomalías del oído interno, que intensifican tanto la sensibilidad al componente de transmisión interna, que el sonido de su propia respiración les resulta agobiante, y pueden llegar incluso a oír el movimiento de sus ojos en las órbitas.

    África

    una pregunta,¿por qué suena la serpiente de cascabel?

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  7. El sonido que llega a nuestros oídos cuando hablamos es la suma de las ondas sonoras que emitimos a través de nuestras cuerdas vocales, saliendo por nuestra boca, más el que se genera dentro de nuestra caja torácica. Es decir, oímos dos voces, una exterior (la que escucha la gente que nos rodea) y la que sale de “nuestro interior´´

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